A la habitual saturación que presenta el tránsito del centro de Villa Urquiza se sumó desde esta semana el cierre temporal del cruce de la avenida Álvarez Thomas y el paso a nivel de la Línea Mitre.
Esto provoca un persistente colapso vehicular, especialmente durante las horas picos, que genera quejas en redes sociales y fastidio entre los residentes de la zona. Las autoridades estiman que por las obras el cruce de vía estará un mes sin funcionar.
La obra está a cargo de Ferrocarriles Argentinos, y consiste en la reparación de las vías a la altura de Álvarez Thomas. Como por allí circula el tránsito pesado, es habitual que las mismas sufran un desgaste, y por ello es necesario periódicamente arreglarlas. La última de ellas fue en 2019, antes de la pandemia. Ahora, se decidió volver a hacer tareas en el lugar, que se estima, se extenderán durante todo noviembre.
Ante ello, los vehículos que circulan por Álvarez Thomas, que suele ser muy utilizada por ser una de las vías de salida hacia la avenida General Paz, por su onda verde y sus tres carriles de ancho, son obligados a doblar en Monroe. Allí se produce un embudo, porque únicamente pueden avanzar cuando está el semáforo verde; caso contrario, lo hacen quienes circulan por la avenida mencionada. Por esto, desde dos o tres cuadras antes se genera una parálisis casi total en la circulación por Álvarez Thomas. La situación genera caos en las calles trasversales, como Blanco Encalada, elegida por muchos para huir del congestionamiento.
Todo se complica en Monroe, donde están las dos opciones para cruzar las vías y seguir rumbo hacia la zona norte de la Ciudad de Buenos Aires. La primera es el paso bajo nivel de Pacheco, que tiene un semáforo de muy corta duración, lo que da lugar a que puedan pasar pocos automóviles por minuto y el resto deba permanecer esperando. La otra es el cruce de Díaz Colodrero, utilizada por varias líneas de colectivo. El inconveniente se da aquí cuando se baja la barrera por el paso de los trenes, que hace que se frene por completo el tránsito.
Por todo esto, el colapso llega a varias cuadras alrededor, y distintas voces han comenzado a hacerse notar en grupos vecinales o redes sociales. Para peor, durante las últimas jornadas se estuvieron realizando refacciones en el asfalto de Díaz Colodrero y Cullen, que hicieron que parte de la acera estuviera inhabilitada. Sin dudas, un verdadero caos que altera los ánimos de miles de vecinos y quienes se trasladan del centro de la ciudad hacia zona norte que atraviesan sus calles y avenidas para ir o volver a sus casas.
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