En barrio porteño de Villa del Parque, tiene una mítica plaza, que es un punto de encuentro entre sus vecinos.
Se trata de la Plaza Aristóbulo del Valle, y lleva ese nombre en homenaje a Aristóbulo del Valle: (1845-1896), jurisconsulto; ministro de Gobierno de Buenos Aires durante las gobernaciones de Álvaro Barros y Casares.
También fue presidente provisional del Senado en 1880; propulsor de la revolución de 1890 y ministro de Guerra y Marina en 1893.
En este maravilloso espacio verde, ubicado entre las calles Cuenca, Baigorria, Campana y Marcos Sastre, posee una serie de servicios para que los que asistan pasen un buen momento. Juegos para niños (renovados hace algunos pocos años), juego de mesas y bancos, calesita y elementos de gimnasios realizar actividad física a cielo abierto de manera gratuita.
Además, la “Plaza de Villa del Parque”, como se la conoce, posee en su interior tres monumentos que la embellecen.
Uno de ellos es el que brinda homenaje al cardenal Antonio Samoré, quien falleció en febrero de 1983. El Cardenal Samoré fue representante papal en la mediación del Conflicto del Beagle sobre la pertenencia de las islas y territorios marinos al sur del Canal Beagle entre Chile y Argentina en 1978, que concluyó en el Tratado de paz y amistad de 1984.
Tambien se puede ver la escultura “La Madre”, realizada por la escultora Mary Luz Luna.
El monumento muestra a una madre orgullosa con un niño en brazos, que alude claramente al amor maternal incondicional. La estatua está ubicada sobre una base de aproximadamente un metro de altura, conformando así una altura total de unos dos metros y medio. Está hecha de cemento y pintada de color blanco.
El tercer monumento es el del General Don José de San Martín, busto realizado por Ulises Tocci.
José Francisco de San Martín y Matorras, nació en Yapeyú, el 25 de febrero de 1778. Fue un militar y político rioplatense cuyas campañas revolucionarias fueron decisivas para las independencias de Argentina, Chile y Perú.
En la actualidad, es reconocido, junto con Simón Bolívar, por ser “El Libertador de América”, además por sus importantes contribuciones a la autodeterminación de una gran parte de la América española.