Se podrá visitar un túnel del Siglo XVIII en San Telmo
Por primera vez y en más de tres siglos, se podrá ingresar al pasaje construido por los religiosos jesuitas de alrededor de treinta metros de extensión y metro y medio de ancho se encuentra ubicado debajo de la Iglesia San Ignacio de Loyola, Bolívar 225, Comuna 1. Whats App de la Ciudad: 115050-0147.
Se puede visitar los martes y sábados a partir de las 15. Para inscribirse, habrá que enviar un mail a: [email protected]
El paseo dura de una hora a una hora y media, y el costo es de 800 pesos por persona. El dinero recaudado será destinado a la restauración y mantenimiento del templo.
¿En cuanto a las características del recorrido? Primeramente se accederá a la torre norte de la iglesia, luego se pasará a la torre sur, de ahí se bajará al claustro y por último a los túneles.
Más detalles sobre la propuesta
Ana María Di Consoli y Soledad Saubide son las gestoras del proyecto cultural que cuenta con el apoyo del Párroco de la Iglesia San Ignacio de Loyola, Francisco Baigorria. Juntos son los protagonistas de la iniciativa que culminó positivamente con la apertura del túnel y del claustro del antiguo Colegio Real y ya forman parte de un nuevo circuito turístico para conocer y descubrir el Casco Histórico de la Ciudad de Buenos Aires. El recorrido incluye la visita a la primera Iglesia de Buenos Aires y a las torres del templo.
Al respecto el Párroco Baigorria, señaló: “Estas aperturas representan un gran aporte a la cultura y el patrimonio de la Ciudad… Estamos abriendo el claustro que estaba cerrado desde 1913, y el túnel que, si bien se sabía que existía, no se lo podía recorrer, con estas obras se puede recorrer una parte importante de la historia argentina”.
Por su parte, Ana María Di Cónsoli, también coordinadora de las visitas guiadas del emprendimiento, manifestó: “Esto fue inicialmente un pedido del actual Papa, que cuando todavía era el cardenal Jorge Bergoglio le encargó al Padre Baigorria la puesta en valor de todo este monumento histórico nacional al que algunos en ese momento llamaban las segundas ruinas de San Ignacio…Y así fue como se empezó por los túneles que eran “la pata” del edificio y una de las partes más endebles, allí, el ingeniero Fontán Balestra se dedicó a la consolidación estructural de la obra y que la cúpula estaba en peligro y la iglesia presentaba rajaduras”.
A partir de esa instancia, se elabora un Plan Master para la Restauración y Puesta en Valor, el que no sólo atendió las necesidades del templo, sino que además, significó el reconocimiento y la jerarquización del mencionado túnel para la apertura luego de tres siglos…
Cabe precisar que los pasajes subterráneos fueron establecidos desde un criterio de estrategia y táctica militar ante la posibilidad de invasiones en épocas del Virreinato del Virreinato del Río de la Plata.
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Por Buen Ciudadano
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