Santiago Pellegrini dice que su estilo es “elegante y personal” y que no le importan las burlas de la gente.
En 2020 resulta extraño ver a hombres vestidos con traje, chaleco, sombrero de copa polainas y bastón, algo acorde a los estándares de moda y elegancia de hasta mediados del siglo pasado. Sobre todo si utiliza cosas tan modernas como el subte o un teléfono móvil. Pero Santiago Pellegrini, un joven de 26 años oriundo del barrio de Vicente López, está reivindicando la figura del “dandy” clásico a más de un siglo de su apogeo.
Santiago dice haberse sentido siempre muy identificado con la vestimenta que se usaba entre los años 1880 y 1930, por lo que desde adolescente se adentró en el mundo de las antigüedades y ahora tiene su propia compraventa.
También afirma que esa es su forma de vestir en todo momento del día e independientemente de las tareas que realice. Como es de suponer, su estilo le ha valido más de alguna burla o insulto en las calles; su familia le advirtió en un comienzo, pero él aprendió a pasar de largo sin poner atención.
“Al principio decían que era raro, que cómo iba a salir con sombrero, bastón, incluso con gemelos. ‘Te exponés a que la gente te diga cosas’, me dijeron al principio. Pero después se dieron cuenta de que es una decisión como cualquier otra, y hoy ya es algo normal”. —Santiago Pellegrini a Infobae—
El joven tiene lugares preferidos para comprar toda su ropa vintage. Principalmente acude a unas cuantas ferias de ropa americana, además de preguntarles a sus vecinos si es que tienen prendas antiguas para donarle o venderle.
“Yo creo que en la década del 80 y 90 la elegancia empezó a bajar. La moda fue… no digo involucionando, porque hay mucha gente todavía que se viste muy bien y sigue habiendo diseñadores reconocidos, pero por lo que se ve ahora en la calle… yo creo que todos se visten más o menos a la moda del momento. Nadie se anima a sobresalir del resto”. —Dice Santiago Pellegrini a Infobae—
Sin embargo, Santiago no escapa del todo al siglo XXI, la tecnología lo ha ayudado en la compra de prendas y libros online, además de haber conocido a su actual novia gracias a un mensaje que ella le mandó después de haber visto una foto suya. Él dice que ella es “la persona ideal. Tengo una novia maravillosa”.
Así, el distinguido y elegante Santiago se pasea por las calles de Buenos Aires robándose las miradas de los peatones y posando para selfies.
Fuente: Antonio Rosselot para UPSOCL