El día 3 de noviembre, la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires, aprobó el proyecto, presentado por el legislador porteño Daniel Del Sol (Vamos Juntos), para la colocación de una placa de homenaje a Diego Maradona, en la esquina de Sanabria y Habana, Villa Devoto.
Es el domicilio donde Diego residió durante varios años de la década del ´90. Como en todos los lugares por dónde sus pasos transitaron, dejó huellas imborrables que dejan su identidad para la posteridad. Nunca nadie olvidará que allí, el Diego, vivió una parte importante de su vida. Se asocia mucho a la etapa donde residía con su esposa e hijas. Es un lugar donde se lo identifica a Maradona. Es común que vecinos o turistas pasen para ver cómo era el domicilio de Maradona. Aunque sea por afuera y llevarse el testimonio de una foto. Según el proyecto de Daniel Del Sol, la placa llevará la siguiente leyenda:
“ESQUINA DIEGO ARMANDO MARADONA En homenaje a un símbolo del fútbol argentino y mundial Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires 30/10/1960”
El origen del reconocimiento de ese lugar como “La esquina Diego Armando Maradona”, data de una anécdota vivida por Diego en 1995, en el partido de regreso a Boca Juniors, el 7 de octubre de ese año, se enfrentó con Colón de Santa Fe. En el transcurso del juego, su amigo Claudio Caniggia le hizo un foul a Unali, se metieron Julio César Toresani y Maradona. El juez los amonestó a los dos y el “Huevo”, tuvo que dejar la cancha porque ya tenía una amarilla. Son las cosas del fútbol, siempre ocurren de esta forma y es la esencia del juego. Palabras van y vienen. En respuesta a una declaración desafiante de Toresani en el vestuario, Diego largó la famosa frase: “A Toresani, le vuelvo a repetir, Segurola y La Habana 4310, y vamos a ver si me dura 30 segundos”.
A los pocos meses, Boca lo contrató a Toresani y terminaron siendo grandes amigos. El año pasado, en abril de 2019, Toresani falleció, estaba pasando un momento depresivo y puede ser que se haya suicidado. Maradona entonces dejó esta frase: “Pensar que lo quise pelear, y hoy lo lloro”. Conclusión Sanabria y Habana: “La esquina Diego Armando Maradona”. Ya quedó definida para siempre. Daniel Del Sol, así describió el motivo de la misma: “Es sinónimo de Maradona. Desde que Diego hizo pública la dirección hace 25 años, se transformó en uno de los lugares más populares de la Ciudad y han pasado miles de vecinos y turistas para sacarse fotos con el cartel que marca el cruce de las dos calles”.
También fue presentada otra propuesta, impulsada desde Argentinos Juniors, para cambiar el nombre de Boyacá y su continuación Punta Arenas, por el de Diego Maradona. La idea es unir al estadio “Diego Armando Maradona” y el Microestadio Cubierto Malvinas Argentinas. El legislador porteño Claudio Ferreño (Frente de Todos) lo ingresó, pero la decisión no será muy rápida porque hay una normativa de la Ciudad, por la cual, no se pue designar una calle o espacio público con el nombre de una persona hasta que transcurran diez años de su fallecimiento.
Por Francisco Grillo
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