En una apuesta por la revitalización y modernización, los dueños del icónico Edificio London, emplazado en la esquina de la avenida de Mayo y Perú, han concluido una profunda renovación que cambiará radicalmente el destino de esta joya arquitectónica. La emblemática estructura, construida en 1890 y conocida por su imponente cúpula diseñada por el arquitecto italiano Salvador Mirate en la década de 1910, se sometió a una restauración integral que va más allá de una simple puesta a punto de su fachada.
En este sentido, la Comuna 1 de Buenos Aires será testigo de una transformación que abarca no solo la estética exterior del edificio, sino también sus usos internos. La iniciativa de los propietarios apunta a convertirlo en un centro corporativo multifuncional, albergando oficinas de alquiler y, potencialmente, espacios habitacionales temporales o permanentes. Además, se proyecta la posibilidad de habilitar una terraza técnica como mirador, otorgando a los visitantes y residentes la oportunidad de contemplar las pintorescas vistas hacia Perú-Florida y la propia Avenida de Mayo.
La relevancia histórica de este edificio, que alberga en su planta baja la London City, no solo radica en su antigüedad y arquitectura distintiva, sino también en las modificaciones que ha experimentado a lo largo de los años. Juan Llames, arquitecto a cargo de la restauración, detalla el proceso: “Hubo que reponer muchas de ellas. Por un lado, algunas estaban desgastadas por el paso del tiempo. Pero había además partes de la cúpula que estaban al aire libre, el agua de lluvia ingresaba al interior”.
Por su parte, Marga Fabbri, arquitecta y artista plástica, contextualiza la transformación de la cúpula: “Esta cúpula no es la original, sino que vino a reemplazar a otra. La anterior era más pequeña, y las pizarras tenían la forma de escamas de pescado. Cuando la empresa Gath & Chaves se muda a este edificio realiza una importante remodelación. Cambian las aberturas, amplían los vanos y así modifican también los espacios interiores. No está claro por qué cambian la cúpula, quizá la original se encontraba en mal estado”.
En este contexto, el proyecto del mirador adquiere especial relevancia. Fabbri comenta al respecto: “Las vistas hacia Perú-Florida y Avenida de Mayo son preciosas. Los propietarios además me confirmaron que el último piso del edificio va a ser un SUM. Va a estar disponible para la gente que trabaja y vive en el lugar. Pero la idea es que también se puedan organizar eventos, lo que abre la oportunidad a que más gente conozca el lugar. Es importante que estos sitios de tanto valor patrimonial se popularicen, que todos puedan disfrutarlos”.
Asimismo, se destaca que la restauración no solo busca preservar la historia del Edificio London, sino también ofrecer nuevas posibilidades de uso que se integren armónicamente con el dinamismo de la zona. El compromiso de los propietarios con la conservación del patrimonio arquitectónico se combina con una visión de futuro que busca asegurar la relevancia y accesibilidad de este símbolo de la avenida de Mayo.