Los boliches de la Ciudad de Buenos Aires, reabrirán para ofrecer un servicio de gastronomía.
En principio, según se anunció desde el Gobierno Porteño, los locales podrán reabrir, pero únicamente podrán disponer de hasta un 30% de aforo para ofrecer gastronomía entre las 7 y la 1 de la mañana.
En tanto, desde el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se dio habilitación para la apertura de discotecas para ofrecer gastronomía en el interior de los locales que podrán abrir y disponer hasta un 30% de aforo para ofrecer gastronomía entre las 7 y la 1 de la mañana.
Según la resolución dada a conocer este miércoles por la Agencia Gubernamental de Control (AGC): “Teniendo en cuenta la situación excepcional de pandemia, deviene necesario autorizar el funcionamiento de autoridades gastronómicas con carácter excepcional y transitorio hasta tanto se produzca el reinicio de la actividad de baile”.
Por su parte, los empresarios dueños de las discotecas ya desarrollaron los protocolos para que se pueda bailar en el lugar, la que ya fue presentada. “La situación no se aguanta más”, aseguran tras la disposición de una primera apertura para uno de los sectores más golpeados por la pandemia.
Hace meses, que desde la Industria del Entretenimiento Argentino (IDEAr), se venía solicitando la reapertura y presentando protocolos seguros para poder garantizar una reapertura cuidada de las discotecas.
“Hoy los encuentros sociales existen, es un gran error querer negarlos. Desde nuestra perspectiva, la única manera de combatir la clandestinidad y garantizar a los jóvenes que puedan divertirse pero con cuidados es con el paulatino regreso de la actividad”, explican desde IDEAr.
“Si pudiéramos abrir nuestros locales, la tasa de fiestas clandestinas bajaría sustancialmente”, agregan.
La propuesta de los empresarios es reabrir con burbujas sociales de no más de 10 personas por mesa y con restricciones para la movilidad dentro del boliche y así garantizar un espacio seguro.
“Nuestra idea es tener controles en el ingreso, tomarle la temperatura a todos los que entran, y tener mesas preparadas con cintas de seguridad alrededor para que la movilidad sea muy baja. Así los chicos podrían bailar entre ellos y con el distanciamiento necesario. Es una forma de adaptarse a la nueva normalidad de forma segura”, dijeron desde IDEAr.