El 5 de junio se celebró el “Día Mundial del Medio Ambiente” en todo el mundo, y el Gobierno porteño iluminó de verde varios edificios emblemáticos de la ciudad, para contribuir a generar conciencia sobre la necesidad de proteger el medio ambiente y sus recursos naturales.
En esta edición, Suecia es el país que auspició el Día del Medio Ambiente, bajo el lema “Una Sola Tierra”, haciendo foco en la biodiversidad o diversidad biológica, que comprende a la variedad de seres vivos que habitan nuestro planeta, y las relaciones que se establecen entre sí y con el medio ambiente que los rodea. Desde las 18 hs del día 05 de junio, el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana porteño, alumbró de color verde la Casa Rosada, el Puente de la Mujer, el Congreso de la Nación, el Monumento de los Españoles y la fachada del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Ciudad.
La consigna “Una sola Tierra” tiene por objetivo resaltar la necesidad de vivir de forma sostenible, en armonía con la naturaleza, mediante cambios sustanciales promovidos por políticas y elecciones cotidianas, que nos guíen hacia estilos de vida más sanos y ecológicos. La sostenibilidad puede destinarse a múltiples usos, desde la energía, los sistemas de protección de la biodiversidad, el comercio mundial y el transporte, hasta nuestros sistemas alimentarios y lo que hacemos para divertirnos. Según datos oficiales de la OMS, actualmente se utiliza el 1,6 % de tierra para mantener nuestro estilo de vida, y los ecosistemas ya no pueden compensar nuestras demandas. El 67 % de las emisiones de gases contaminantes del efecto invernadero, están vinculadas con nuestro estilo de vida. La OMS estima que el 90% de la población mundial respira aire contaminado, y las estimaciones actualizadas, revelan que siete millones de personas mueren cada año por la contaminación del aire ambiente (de exteriores) y doméstico. El deterioro del medio ambiente en las últimas décadas, ha causado desastres naturales, alteraciones en las estaciones, y problemas en el suministro de agua, entre otros. El Centro de Análisis de Información sobre Dióxido de Carbono, manifestó que Estados Unidos es el mayor emisor de gases contaminantes, responsable del 27% de CO2 en todo el mundo. La temperatura del planeta aumentó un 1 grado Celsius entre 1880 y el 2015, y la temperatura de los océanos se incrementó en 0,11 grados Celsius entre 1971 y el 2010. El cambio climático generó fenómenos meteorológicos extremos como huracanes, ciclones tropicales, olas de calor, sequias y lluvias torrenciales, que causaron 600.000 muertes en la última década. Dichos cambios climáticos provocaron la escases de agua en el 40% de la población mundial. En los últimos cien años, el nivel del mar creció entre 10 a 20 centímetros. En el Ártico, el área cubierta por hielo se ha reducido en un 40%, desde 1979 hasta el 2014.
El impacto ambiental causó que un tercio de las especies marinas estén en riesgo de extinción, y según un estudio del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), si la temperatura del planeta aumentara en 4,5 grados Celsius, el 48% de los animales de todo el mundo podrían desaparecer.