Se trata de jóvenes que se destacan en las redes sociales pero además están comprometidos con el medio ambiente. Compromiso, solidaridad y conciencia es la característica que los define.
Son jóvenes influencer, son estrellas de las redes sociales, y tienen como objetivo lucirse pero también generar conciencia.
El mensaje que trasmiten impacta muy fuerte en los millones de seguidores que cada uno desde su cuenta administra.
El compromiso que asumen es poder influir en las nuevas generaciones sobre el cuidado ambiental, los cambios climáticos y sus efectos.
“La indiferencia no es una política sino una condena”. “No queremos un medio ambiente, lo queremos completo”… Las consignas se acumulan una detrás de otra, las movilizaciones suelen suceder los viernes y los protagonistas siempre son jóvenes.
La referente mundial es, claro, Greta Thunberg, una activista sueca de 16 años famosa por participar cada viernes de una marcha pidiendo un cambio de conciencia y por su charla Ted al respecto. Gracias a su influencia, en diciembre del 2018 más de 20 mil estudiantes se manifestaron en 270 ciudades del mundo. Nuestro país no fue la excepción.
Miles de personas se suman a la iniciativa de los influencer y acompañan las propuestas con diferentes manifestaciones al congreso.
En nuestro país, es la referente absoluta dentro del mundo redes sociales de la conciencia ambiental y animal. Tiene 25 años y 450 mil seguidores y se define a sí misma como actriz, cantante, activista social ambiental y animal, y vegana. Comenzó su carrera como cantante de chica, actuó en tiras juveniles (participó por ejemplo en Aliados), pero su verdadera profesión surgió de la comunión de un oficio con el otro. El otro es justamente el de una activista.
Se la pasa leyendo sobre el tema y estudiando la situación del planeta para dar un mensaje sólido.
Cuenta que vive de shows musicales. Si bien el mercado laboral para los influencers es próspero, ella elige otro camino. “De redes sociales vivía más en el pasado, pero al hacerme vegana empecé a rechazar las ofertas porque no estaban alineadas con mis valores”, explica.
“Mi papá nunca se cuestionó si todas las crisis iban a ocasionar que de repente no haya más nieve, o si iba a tener para tomar agua potable, o si iba a tener qué comer, o si se iban a extinguir más de un millón de especies. Ni mi papá, ni mi mamá ni mucho menos mis abuelos”, dice mientras conversamos en la casa de Palermo chico que comparte con su madre.
“Si no hacemos caso a lo que está pasando y no accionamos ahora, todo eso que es una preocupación, va a pasar a ser real”, concluye antes de agarrar su ukelele y cantar Equidad, su último hit dedicado justamente al cuidado del planeta y todas sus especies.