Sabemos de la importancia que adquieren para la vida, y el adecuado funcionamiento del ecosistema. Constituyen una presencia fundamental, especialmente desde el ámbito urbano, a partir de su noble misión en cuanto la producción de oxígeno y al mismo tiempo, la absorción de C02 o Dióxido de Carbono, cuya acumulación incrementa los indicadores vinculados al calentamiento global o cambio climático, a través de la generación de los gases conocidos como de efecto invernadero.
En nuestra Ciudad de Buenos Aires, y desde la moderna dinámica administrativa institucional distribuida en Quince Comunas, la presencia de los árboles es una realidad evidente, que en todo momento, es atendida y analizada, de manera de poder sumar nuevas especies al espacio público.
Los cuarenta y ocho barrios que integran CABA exhiben atractivas arboledas, una de las preferidas para Vecinos y turistas que esperan la llegada de noviembre, para hacer un alto en la vorágine cotidiana, elevar la mirada y recrearla con las copas de color azul/violáceas propias de los Jacarandas en Primavera!
Un espectáculo aparte, y además, son amigables con el entorno, se pueden en apreciar en Palermo, Recoleta, San Nicolás, Belgrano, el Centro, Retiro.
La incorporación del jacarandá a BA fue una iniciativa del reconocido y visionario paisajista Carlos Thays.
Otro árbol de particular belleza, que se puede disfrutar en la Ciudad, es el Palo Borracho. Impactan sus flores rosadas de diez, quince centímetros de diámetro sobre la Avenida 9 de Julio…
No podemos dejar de mencionar ¡al Ombú! ¡Bien argentino! De acuerdo con los especialistas en Botánica, es una hierba gigante y no un árbol. De diez a quince metros, y raíces abundantes, se los puede ver en los Parques Lezama, Saavedra, Bosques de Palermo, Parque Rivadavia, etc.
En tanto el Ceibo, flor nacional de la República Argentina y del Uruguay, se caracteriza por el formato en gajos y el color rojo intenso brillante de sus pétalos… ¿Dónde los podemos ver? En Plaza Lavalle, frente al Teatro Colón, en la zona que rodea a los Lagos de Palermo, en cercanías del Rosedal…
Las Tipas abundan en diferentes áreas porteñas, entre diciembre y enero se cubren de flores amarillas. Popularmente se dice que durante los meses de octubre/diciembre suele “llorar”… La expresión tiene que ver con el exceso de savia que se esparce como una suave llovizna, no mancha, apenas ensucia un poco…
Se las puede visualizar en calles y plazas, sobre todo en Belgrano y Palermo.
Un fruto de la naturaleza para internalizar su significado en la vida diaria, para cuidar y preservar en todos y cada uno de nuestros barrios de la Ciudad de Buenos Aires, ¡comenzando por los más chicos de la casa!
The post Los árboles y su presencia en las Comunas Porteñas appeared first on Visión Porteña.
