El anuncio de que desde este miércoles regirán cambios en los exámenes para sacar la licencia de conducir lo hizo el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta que indicó que habrá mayor exigencia respecto a la teoría y además “se va a rendir en la calle, enfrentando las situaciones reales que los conductores viven todos los días”.
Las condiciones propuestas en esta modificación alcanzan a la categoría B1, que es la que habilita a manejar automóviles y que tienen la mayoría de los porteños. Las personas de 16 a 39 años podrán obtenerla por un período de hasta 10 años, que será definido de acuerdo con los resultados obtenidos en cada una de las instancias de evaluación.
Sobre el cambio respecto al manejo de situaciones de la vida real, las fuentes oficiales indicaron que “para que el trámite sea más sencillo, el examen va a poder hacerse desde mediados de octubre en cualquiera de las 10 comunas habilitadas, conduciendo durante 15 minutos en las cuadras cercanas a la sede comunal”.
Este sistema se pondrá a prueba en la Sede Comunal 12 que integra los barrios de Coghlan, Saavedra, Villa Urquiza y Villa Pueyrredón. Luego se incorporarán las Sedes de las Comunas 2, 3, 4, 5, 6, 10, 13, 14 y 15.
En la presentación, Larreta indicó: “Antes, solo se buscaba confirmar si la persona sabía manejar un auto. Por eso se hacía en una pista cerrada y aislada del tránsito. Ahora, además de eso, queremos comprobar que pueden hacerlo en el tránsito, interactuando con peatones, colectivos, motos, ciclistas y otros autos. Para esto vamos a tomar las medidas de seguridad necesarias. Los autos con los que se van a tomar los exámenes van a ser de doble comando para que el evaluador pueda minimizar cualquier error y evitar riesgos”.
El primer mandatario porteño añadió: “Por otro lado, la validez del registro se podrá extender hasta 10 años para los conductores de 16 a 39 años; y a 6 años para los mayores de 40. Progresivamente con la edad, va a ir bajando el plazo de renovación ya que los estudios muestran que a medida que uno crece hay habilidades que se van perdiendo y que es necesario evaluar con mayor frecuencia”.
También se supo que en primera instancia el costo del trámite de otorgamiento es de $2.042. A ese valor habrá que agregarle el Certificado Nacional de Antecedentes de Tránsito (Cenat) que cuesta $1.200.
Esta nueva medida se enmarca en el Plan de Convivencia Vial bajo la premisa de que ninguna muerte ni herido grave en el tránsito es aceptable. El gobierno porteño lleva adelante una serie de políticas públicas con el fin de cumplir con el compromiso de reducir un 20% las víctimas fatales por siniestros viales para el 2023 y un 50% para el 2030, detallan fuentes oficiales.
En tanto, el jefe de Gabinete de la Ciudad, Felipe Miguel, dijo: “Cada persona que sale con un auto a la calle tiene que estar bien preparada, con los conocimientos y las habilidades necesarias para enfrentarse a los imponderables y las situaciones del tránsito. Por eso, desde la Ciudad, en línea con los principales países del mundo, vamos a implementar un examen más exigente, que incluye una evaluación teórica más rigurosa y un práctico en calle. Además, para simplificar el trámite y seguir cuidando el tiempo de los vecinos, vamos a modificar los períodos de validez según la edad de los conductores”.
