Dentro del contexto de las reaperturas que se están dando a nivel sanitario en el país, las universidades naciones son una de las pocas actividades que continúan de manera virtual.
De manera gradual, las clases presenciales, a nivel nacional, fueron volviendo a la presencialidad, tanto en el nivel inicial, el primario como en el secundario.
No obstante, las clases en las universidades nacionales son las más atrasadas en cuanto a las aperturas y la vuelta a la presencialidad.
Jaime Perczyk, el flamante ministro de Educación, que llegó después de la renuncia de Nicolás Trotta, adelantó que una de sus prioridades es ampliar la presencialidad en el nivel universitario.
En la actualidad, la mayoría de las instituciones educativas de dicho nivel, cuentan con algún tipo de presencialidad, pero es el nivel educativo más atrasad.
En este sentido, es posible que casi todos los estudiantes universitarios, completen los dos años en forma virtual.
Lo cierto, es que, aún en medio de la pandemia, desde fines de 2020, la Universidad de Buenos Aires, retomó el dictado de clases, en el caso de las materias prácticas, de forma presencial.
Mientras tanto, de acuerdo a registros oficiales, 18 mil alumnos de los últimos años regresaron a las aulas en las facultades de Odontología, Agronomía, Veterinaria, Exactas, Farmacia y Bioquímica, Medicina e Ingeniería.
En principio, desde la UAl señalan que “Si bien nuestro anhelo es volver a la presencialidad plena, por sus características (tamaño, cantidad de alumnos, diversidad de materias, etc), la UBA no puede regresar de un día para el otro a las aulas y necesita hacerlo en forma escalonada y con planificación. Nuestros estudiantes, muchos de ellos del interior o que trabajan, necesitan saber con anticipación si van a cursar en forma presencial o virtual y no sufrir cambios en la mitad de un cuatrimestre”. Por su parte, en la Universidad de La Plata (UNLP) dieron a conocer un comunicado, que señala que “Desde hace muchos meses tenemos presencialidad en las materias que no son compatibles con la virtualidad y además sumamos la posibilidad de rendir en persona los exámenes. A la altura en la que estamos del cuatrimestre, volver a la presencialidad plena sería una locura porque hay un montón de chicos que se han quedado en sus pueblos. El 40% de nuestra matrícula se compone de estudiantes del interior de la provincia y del país”.