El jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se unió a una marcha en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en apoyo a Israel, condenando enérgicamente el terrorismo en todas sus manifestaciones. El evento se llevó a cabo en respuesta al ataque del grupo terrorista Hamas, que cobró la vida de más de 1.000 personas.
El lunes pasado, Horacio Rodríguez Larreta, Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, se unió a una marcha en solidaridad con Israel, en respuesta al ataque perpetrado por el grupo terrorista Hamas, que resultó en la trágica pérdida de más de 1.000 vidas. En el evento, que tuvo lugar en la avenida Estado de Israel al 4200, en el barrio de Almagro, Rodríguez Larreta compartió sus pensamientos y expresó su solidaridad con el pueblo israelí.
En compañía de destacadas figuras políticas como Patricia Bullrich, Jorge Macri y Clara Muzzio, el Jefe de Gobierno se sumó a la concentración organizada por la AMIA, la DAIA y la Organización Sionista Argentina (OSA), bajo el lema “Juntos, Israel vencerá el terror, siempre”. En este sentido, Rodríguez Larreta expresó: “Queremos expresar nuestra más firme condena al terrorismo en todas sus formas y solidarizarnos con el pueblo de Israel y las víctimas de los hechos trágicos de los últimos días.”
El líder político no dejó margen para la indiferencia ante los actos terroristas y ofreció el apoyo de la comunidad porteña para ayudar en todo lo que esté a su alcance. “No podemos permanecer indiferentes. Estamos a disposición de la comunidad para ayudarlos en todo lo que sea posible”, enfatizó Rodríguez Larreta.
La marcha reunió a una multitud que se unió en un gesto de solidaridad con el pueblo israelí, manifestando su repudio al terrorismo en todas sus manifestaciones. En este sentido, la comunidad argentina se unió a la causa de Israel, compartiendo un mensaje de unidad y apoyo en momentos de adversidad.
Este evento trasciende las fronteras y refleja la importancia de mantener una sólida red de solidaridad internacional. En medio de la condena al terrorismo en todas sus formas, la marcha en apoyo a Israel se convierte en un símbolo de unidad y hermandad en tiempos de adversidad.
Este gesto de solidaridad no solo reafirma el vínculo entre Argentina e Israel, sino que también envía un mensaje contundente a nivel internacional, llamando a la unidad contra el terrorismo. La marcha en sí misma es un recordatorio de que, en momentos de tragedia, la humanidad puede unirse para enfrentar desafíos y buscar soluciones conjuntas. La presencia masiva en esta manifestación ejemplifica la capacidad de las personas para mostrar empatía y apoyo a aquellos que sufren, independientemente de las distancias geográficas que los separan.
