El pan lactal, tal cual lo conocemos fue fabricado por primera vez en nuestro país… ¡en Caballito!
Esto sucedió cuando se instaló La Panificación Argentina en 1927 en su sede de Canalejas 753, hoy, Felipe Vallese. La empresa era de origen belga y había adquirido dos manzanas delimitadas por Arengreen, Colpayo, Méndez de Andes y Rojas, separadas por la calle Canalejas.
La inauguración de esta importante empresa contó con la presencia del embajador del reino de Bélgica ante la Nación Argentina, funcionarios de la Nación, de la Municipalidad y numerosos vecinos. Y se convirtió en la más importante panificadora de la época en el país y en Latinoamérica.
La identificación más característica de La Panificación Argentina fueron sus carritos pintados de rojo que recorrían la ciudad y parte de la provincia, tanto en el norte como en el sur, anunciando su llegada con el sonido de una corneta.
No solo distribuían pan lactal, entre sus variados productos contaban con pan negro integral, baguette de pan blanco, facturas, emperadores y budines.
El conductor vestía uniforme provisto por la empresa y además había sido capacitado previamente sobre los productos que ofrecían. Por lo general detenían sus carros en el mismo lugar al que se acercaban los clientes.
A partir de 1970, al prohibirse la tracción a sangre en la Capital Federal a través de la Ordenanza Municipal Nro. 12.867, los carros tirados por caballos o por mulas fueron reemplazados por camionetas.
En las dos manzanas mencionadas disponían de un molino harinero y hornos a leña que más tarde fueron reemplazados por hornos a gas. La Panificación contaba también con una imprenta propia en la que se editaba una revista que era distribuida entre sus proveedores, personal y clientes. Tenían un servicio médico y odontológico, y para los 400 caballos y 200 mulas, un servicio veterinario.
En la elaboración del Pan Lactal participan sólo los maestros belgas. Los demás empleados tenían prohibido el acceso al lsector donde se hacía ese pan. Años más tarde lanzaron al mercado una marca de leche propia, de nombre Clamor. La Panificación Argentina llegó a contar con 900 empleados entre los que se contaban herreros, carpinteros, electricistas, etc.
Con el tiempo tuvieron siete centros de distribución, entre ciudad y provincia y desde cada uno de ellos partían diariamente a tempranas horas de la mañana los tradicionales carritos rojos.
En el año 1978 la empresa fue intimada a modernizar sus maquinarias y el edificio. Contaban con un plazo de cuatro años para hacerlo. Sin embargo, en 1982 tomaron la decisión de trasladar las instalaciones a la Provincia de Buenos Aires, estableciéndose en la localidad de San Martín. Finalmente en 1989 La Panificación Argentina es vendida a la empresa Fargo.