El miércoles 8 de julio se realizó una reunión virtual con dirigentes de la AFA, médicos e infectólogos, dónde se definió la aprobación de un protocolo muy completo y detallado para el regreso a los entrenamientos de los jugadores profesionales de los planteles del fútbol argentino.
No hay todavía una fecha determinada para la iniciación de estas prácticas, pero se estima que pueda llegar a producirse en el mes de agosto. Todo depende de lo que se decida con el aislamiento preventivo que se definirá para después del 17 de julio, cuando finalice la actual etapa de cuarentena restrictiva. La necesidad de volver a entrenar se disparó con las declaraciones de Marcelo Gallardo que describió de manera pormenorizada el efecto que le causa a un atleta la suspensión del entrenamiento. La consecuencia es que lleva mucho tiempo para ponerse a punto de competencia. Quizás, como lo definió, un período igual al que estuvo parado. Las consecuencias puedan aparecer, cuando se reanuden los torneos, en forma de desgarros y otras lesiones similares que afectan a la integridad física de un deportista. Desde la AFA, algunos clubes y el mismo gobierno, a través del Ministerio de Salud, estuvieron atentos a buscar la manera de diseñar un protocolo que proteja la salud de los jugadores y de sus entornos personales. El protocolo está elaborado y fue presentado. Son veinte carillas que detallan paso a paso todas las medidas de prevención para proteger la actividad con el menor riesgo posible. Lo elaboró el Departamento Médico de AFA y tuvo como base argumental el protocolo que se aplica en la Liga española. Está en manos de Claudio Tapia, presidente de AFA y de Marcelo Tinelli, presidente de la Liga Profesional de Fútbol.
Compuesto por tres ejes. Ellos son: Comportamiento en las prácticas Diagnósticos y seguimientos Medidas para las instalaciones y los traslados
Para empezar a entrenar, se hará en grupos de seis jugadores que respetarán la distancia de 1,5 metros entre cada uno, a diferencia de los comienzos en Europa, con prácticas individuales. No compartirán espacios cerrados. Si los clubes disponen de predios de más de una cancha para entrenar, podrán hacerlo de a 6 jugadores por cada campo de juego.
Se pondrá mucha atención en los testeos a los jugadores. Se realizarán pruebas a los planteles 72 horas antes del primer entrenamiento. El día del primer entrenamiento semanal y si hubiera algún caso sospechoso. El costo es $ 500 por test y deberán costearlos los clubes. Es un problema, sobre todo para los más chicos, en estos tiempos en que están totalmente paralizados los ingresos. La AFA dispondrá de un subsidio de parte de la Conmebol de alrededor de 600 mil dólares, pero esto no es suficiente. Las instalaciones de los clubes tendrán que contar con todas las medidas sanitarias que corresponda a los protocolos específicos. Los futbolistas deberán trasladarse en sus autos particulares. De no poder hacerlo, la institución tendrá la obligación de disponer combis y micros puerta a puerta respetando la distancia sanitaria exigida.
Debe quedar aclarado que este documento normalizador de los entrenamientos es para los jugadores que integren los planteles de primera División. Para el ascenso se diseñará otro tipo de protocolo, adecuado a las necesidades de los clubes más modestos.
Higiene y distanciamiento en los entrenamientos
Mantener una buena higiene. Lavarse bien las manos. Usar desinfectante. Evitar tocarse los ojos, la boca y la nariz. Toser o estornudar en un pañuelo o en el hueco del codo, cubriendo la boca y la nariz. Tirar los pañuelos en un contenedor sellado. Desinfectar el equipamiento deportivo regularmente, así como las zonas por donde más personas circulen. Evitar compartir el equipamiento deportivo como, por ejemplo, las botellas de agua. Contar con estrategias para limitar el contacto/interacción. Por ejemplo, en un edificio, establecer caminos de dirección única y mantener las puertas abiertas. Evitar darse la mano, chocar los cinco y cualquier otro contacto físico. Evitar la salivación, en cualquier lugar y forma. Prohibir compartir cualquier tipo de infusión, especialmente el mate. Dormir y comer de forma adecuada.
Todo esto depende de las cifras de casos positivos, letalidad, ocupación de camas de terapia de la pandemia. La decisión que se tome por esa causa tendrá que ver con la liberación o no, de algunas actividades. Una de ellas, será el regreso a los entrenamientos del fútbol. Claudio Tapia, presidente de AFA, manifestó que: «quiere que haya igualdad con las actividades permitidas para todos y que los equipos volverán a entrenar cuando todo el país esté en Fase 4».
Por Francisco Grillo
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