La Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde 1 de cada 4 residentes pertenece a la tercera edad, reconoce la importancia de brindar atención de calidad a este grupo demográfico. Para abordar este desafío, se ha puesto en marcha una capacitación integral dirigida a asistentes gerontológicos, con el propósito de ofrecer cuidados especializados y acompañamiento a las personas mayores en su cotidianidad.
La necesidad de una formación específica en el cuidado de personas mayores ha sido atendida por la Ciudad con la creación de espacios formativos destinados a aquellos que deseen desempeñarse como asistentes gerontológicos. Estos profesionales se dedican a la prevención, el acompañamiento y la asistencia en las actividades diarias de los adultos mayores, ya sea en sus hogares o en instituciones.
Este camino de formación se convierte en una oportunidad laboral valiosa. Diversas motivaciones llevan a las personas a elegir esta vocación, desde aquellos que buscan especializarse en el cuidado de adultos mayores hasta quienes desean brindar un apoyo más completo a sus seres queridos mayores. Es especialmente significativo para muchas mujeres, que encuentran en esta capacitación una manera de profesionalizar el cuidado que históricamente han brindado de manera no remunerada en sus familias.
Alejandra Estevez, quien se desempeña como asistente gerontológica en el Hogar San Martín del gobierno porteño, comparte su motivación: “La prioridad por la que estudié para ser asistente gerontológico es el amor que me dieron mis abuelos, quería corresponderle al resto de los mayores el amor que sentí por ellos”. Esta formación no solo enriquece a los profesionales, sino que también brinda a los adultos mayores un cuidado más informado y empático.
El compromiso de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con el bienestar de los adultos mayores se refleja en el Registro de Cuidados Gerontológicos, un recurso único en Argentina. Disponible en línea, este registro público y gratuito reúne a los asistentes gerontológicos debidamente capacitados, brindando transparencia y seguridad a los ciudadanos que buscan estos servicios. Desde su inicio en 2016 con 2,200 profesionales registrados, ha crecido a más de 7,700 asistentes en las diferentes Comunas de la Ciudad. Esta iniciativa no solo eleva el nivel de la atención, sino que también otorga confianza tanto a quienes brindan como a quienes buscan estos cuidados.
El compromiso con la capacitación continua es evidente en los esfuerzos de la Ciudad por enriquecer y diversificar la formación de los asistentes gerontológicos. Además del registro, se brindan orientaciones gerontológicas especializadas y se ofrece una Diplomatura en Gerontología Comunitaria. Cada año, más de 16,000 personas se benefician de programas de formación continua, garantizando que los profesionales estén actualizados y preparados para enfrentar los desafíos cambiantes en el cuidado de los adultos mayores.
Sofía Torroba, Subsecretaria para Personas Mayores del gobierno porteño, destacó la importancia de esta formación: “Desde el Gobierno de la Ciudad el objetivo es seguir avanzando en el desarrollo de los cuidados de personas mayores, desde un modelo de atención centrado en el vecino, que contemple las realidades y necesidades de cada uno en particular.” La capacitación de asistentes gerontológicos no solo responde a una necesidad, sino que también refleja un compromiso sólido con el bienestar y la calidad de vida de los adultos mayores de la Ciudad.
Por Visión Porteña
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