El gobierno porteño anunció un ambicioso plan de inversión para modernizar hospitales y centros de salud, con mejoras en infraestructura, tecnología médica y ampliación de servicios. La iniciativa busca optimizar la atención y garantizar el acceso equitativo a la salud pública en un contexto de creciente demanda.
La Ciudad Autónoma de Buenos Aires destinará más de $76.000 millones para mejorar la infraestructura y tecnología de los hospitales y centros de salud públicos. La medida, presentada por el jefe de Gobierno, Jorge Macri, junto al ministro de Salud, Fernán Quirós, y la vocera institucional, Laura Alonso, busca acompañar el crecimiento en la demanda del sistema de salud y fortalecer la calidad de la atención en todos los niveles.
En conferencia de prensa, Jorge Macri destacó la importancia de esta inversión en un contexto desafiante: “En un momento económico difícil tuvimos una gran capacidad de respuesta frente a una demanda creciente de muchos pacientes que antes no usaban el sistema público”. En este sentido, el funcionario subrayó que la salud en la Ciudad seguirá siendo “pública, de calidad, universal, solidaria y gratuita, para todos, pero con prioridad para los porteños”.
La iniciativa contempla mejoras en las guardias hospitalarias, la ampliación de consultorios externos, la modernización de quirófanos y terapias intensivas, y la incorporación de equipamiento de última generación. A su vez, se construirán nuevos Centros de Salud y Acción Comunitaria (CeSAC) y se reforzará la red de atención primaria.
En cuanto a infraestructura, la Ciudad llevó adelante 90 obras en hospitales y centros de salud en el último año, con una inversión cercana a los $59.000 millones. Este año, el plan se ampliará con nuevos proyectos. En los próximos días finalizarán las obras en la nueva guardia y los consultorios externos del Hospital Piñero, así como la sala de internación para pacientes de Salud Mental en el Hospital Rivadavia.
Asimismo, se prevé la inauguración del CeSAC N° 42 en el barrio de Boedo, junto con la ampliación de consultorios en otros cinco CeSAC ubicados en Floresta, Barracas, La Boca, Flores y Villa Urquiza. Además, se sumarán dos Centros de Especialidades Médicas Ambulatorias (CEMAR) en Villa Urquiza y Recoleta, así como dos Centros Integrales de Atención en Villa Devoto y La Carbonilla, Paternal.
El plan también contempla la incorporación de herramientas digitales para optimizar la gestión hospitalaria. Durante la primera mitad del año, se implementarán los sistemas RIS (Radiology Information System) y PACS (Picture Archiving and Communication System), que permitirán digitalizar la gestión de turnos y el almacenamiento de imágenes médicas, mejorando el acceso a la información clínica.
A su vez, se continuará con la ampliación del sistema de turnos “Fila Cero”, una iniciativa diseñada para reducir los tiempos de espera y agilizar la atención en los distintos centros de salud.
Con una inversión superior a los $15.000 millones, la Ciudad sumará nuevos angiógrafos, tomógrafos, resonadores y equipos para estudios de alta complejidad, reforzando la capacidad diagnóstica y terapéutica del sistema de salud público.
En la misma línea, el ministro Fernán Quirós destacó el impacto de estas mejoras en la atención de los vecinos: “Queremos que cada ciudadano se sienta acompañado y participe de la construcción de una vida saludable en el barrio, y que el sistema se acerque a la comunidad, la atención sea accesible, equitativa, humana y de calidad”.
En 2024, los hospitales públicos porteños registraron un promedio de 100.000 prestaciones diarias, lo que representó un incremento del 20% respecto al año anterior. En tanto, se realizaron más de 50.000 intervenciones quirúrgicas programadas, un 25% más que en 2023.
Por su parte, Jorge Macri aseguró que esta inversión responde a una administración eficiente de los recursos: “Con lo que ahorramos, bajamos impuestos e invertimos en áreas prioritarias como es la salud. Estas obras son cambios concretos. Acá no hay verso”.
Con estas medidas, la Ciudad busca consolidar un sistema de salud público moderno, accesible y de calidad, adaptado a las necesidades de los vecinos y con una fuerte inversión en tecnología y recursos humanos.