En el mes donde se desarrollan actividades por el día internacional de la mujer, la secretaria de Seguridad, Elizabeth Caamaño, junto a personal de la Superintendencia de Violencia de Género, inauguraron una grada pintada de color violeta como símbolo de la lucha mundial para erradicar la violencia contra la mujer.
El gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, por medio de la Secretaría de Seguridad y el Departamento de Protección Familiar y de Género y en conjunto con la Unidad de Prevención Barrial, UPE, en el marco del encuentro de mujeres del barrio Padre Mugica, realizó la inauguración de una grada violeta que contiene frases de las mujeres del barrio como un símbolo de lucha contra la violencia de género.
Durante la tarde de hoy participaron de este acto y de la ceremonia la secretaria de Seguridad, Elizabeth Caamaño, la Comisario Inspector en Jefe del Departamento Protección Familiar y de Género, Silvia Mercado, y la Comisario Rosana González, Jefa de la División Protección Familiar Área Este.
Al momento de hablar, Elizabeth Caamaño dijo: “Hoy vinimos simbólicamente a inaugurar una grada violeta donde las mujeres que hace 8 años nos acompañan pusieron una frase que representa su lucha; para poder ser escuchadas, para poder ser libres y para poder sostener y crecer en lo que es la igualdad de género”.
La secretaria de Seguridad de la Ciudad también destacó el trabajo que realizan en conjunto la Policía de la Ciudad, la Unidad de Prevención Barrial, la UPE y las vecinas del barrio para visibilizar una problemática que padecen muchas mujeres en todo el país.
A su vez, Caamaño agregó: “La búsqueda del Encuentro de Mujeres tiene ese objetivo y que la policía se pueda sumar desde la cercanía, desde la escucha y desde su rol, es muy virtuoso, con lo cual esta participación y estas acciones en conjunto nos van a ayudar en la lucha”.
En tanto, la Comisario Silvia Mercado destacó el rol de la mujer en la sociedad y recordó a las mujeres caídas en el cumplimiento del deber: “Quiero dedicar este espacio a Maribel Zalazar y Florencia González. Mujeres que hoy son heroínas, que han dado la vida por esta policía y han abrazado su profesión como nadie. Sin ninguna duda vamos a honrarlas por siempre y van a vivir, como decimos los policías, en el pedestal de la gloria”.
Para finalizar, la Comisario Rosana González, quien, a su vez, desarrolla su servicio dentro del barrio, hizo referencia al trabajo que se hace desde la Policía de la Ciudad en el lugar: “Nosotros tratamos de acercarnos, de que nos escuchen, lo que buscamos es que nos vean que estamos para ayudarlas, para protegerlas, porque ese es el trabajo que hacemos nosotros, proteger a lo más vulnerables, que ellas entiendan que estamos para acompañarlas, no sólo en tomar la denuncia”.
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