¿No te cansás de no jugártela y vivir eternamente el juego de las tibiezas…?
La humanidad está patas para arriba y vos seguís sosteniendo que mejor malo conocido que bueno por conocer… tus declaraciones no te elevan a tu nuevo estado de vida, te estancan.
Para que tu pareja funcione saludablemente, para que tu trabajo califique como óptimo, para que tus hijos te presten atención, para que tus amigos sean de calidad… tenés que elegir I N V O L U C R A R T E. Lo cual implica saltar del trampolín más alto que hay en la pileta y dejar de realizar cálculos algebraicos innecesarios.
Cuando te involucrás, te comprometés con tu vida, y solo cosas buenas pueden ocurrir de ese ensamble.
Comprometerse con los vínculos y acontecimientos de tu vida, te posiciona en otro nivel, asumís por añadidura un rol protagónico de acción, y no de espera pasiva. Se enriquece el territorio de tu existencia.
Dejás de jugar a las escondidas y pasás a hacerte cargo, por ende el Universo comienza a conspirar a tu favor.
Ya es hora de empezar a activar la Ley de Correspondencia, lo que ocurre adentro… se replica afuera, si tu filosofía de vida es involucrarte en cada acto… se replicará en cada acontecer por fuera, y como un imán comenzarás a generar relaciones de valor, proyectos profesionales de alto vuelo y otras tantas bendiciones más que el éter te tiene preparadas.
¡Este es el momento, la respuesta es SI, AHORA, YA!
Con afecto.
Noelia de la Fuente, Psicóloga Social.