El gran músico argentino, Luis Alberto Spinetta, fue homenajeado ayer, al cumplirse 70 años de su nacimiento, un 23 de enero de 1950.
Spinetta vivía en el barrio porteño de Villa Urquiza, desde el año 1989 hasta que murió, el 8 de febrero de 2012 y según cuentan allegados, el amaba su barrio. En primer lugar vivió en Miller y Manuela Pedraza, y luego se mudó a Iberá al 5.000. Allí también funcionaba su estudio de grabación que los llamó La Diosa Salvaje, al igual que una de sus canciones.
En la actualidad, varios son los homenajes que están plasmados en la Ciudad de Buenos Aires en su honor, como la placa que está muy cerca del Obelisco, la estatua emplazada en Villa Urquiza, y el mural que se puede apreciar en el Paso Bajo Nivel de avenida Congreso. Asimismo, otra manera de tener a este gran artista cerca de nosotros es en cada uno de los Bares Notables de la ciudad, cuando puede escucharse cada nueva versión de su “muchacha ojos de papel”.
Cabe recordar, que el día de su cumpleaños, 23 de enero, es ahora se celebra en Argentina el Día Nacional del Músico, en homenaje a Spinetta, luego de que se aprobara la Ley 27.106, que se promulgó el 26 de febrero de 2015 en el Boletín Oficial.
Luis Alberto Spinetta, el Flaco, como le decían, se lo considera como el padre del rock nacional. Tuvo fuertes reconocimientos en muchos países del mundo por lo grandioso de su faceta tanto instrumental como poética, a lo largo de toda su carrera artística.
El Flaco fue el creador de muchas bandas de rock nacional como Almendra, Pescado Rabioso, Invisible, Spinetta Jade y Spinetta y los Socios del Desierto.
Tuvo una carrera muy prolífica, y nos dejó una incontable cantidad de canciones, que fueron todas exitosas como: Muchacha ojos de papel, Seguir viviendo sin tu amor, El anillo del Capitán Beto, Mi elemento, Ana no duerme, Rutas argentinas, Maribel se durmió, Cantata de puentes amarillos, El monstruo de la laguna y Canción para los días de la vida, entre tantas otras.
Spinetta, nació un 23 de enero de 1950 en Buenos Aires, era hincha fanático de River Plate y de su “Capitán Beto“, su estilo y poesía fueron incomparables y se lo considera un ícono del rock nacional. La emblemática revista Rolling Stone, lo catalogó “el mejor músico argentino de rock”. Y así será recordado.