Desde Ademys también remarcaron que la marcha se realiza para reclamar «en defensa de los derechos laborales y contra las reformas al Estatuto docente» / Foto: Eliana Obregón.
Docentes y estudiantes de la Ciudad de Buenos Aires marcharán este miércoles a la Legislatura en reclamo de mayor presupuesto para la educación, mejores condiciones laborales y salarios, y el arreglo de los problemas edilicios y la falta de calefacción en las escuelas.
La movilización, que también tendrá como eje el rechazo a las modificaciones al estatuto docente y el respeto a las diversidades, se realizará a partir de las 17 desde la esquina de Córdoba y Ayacucho, en el barrio de Balvanera, rumbo a Perú 160, sede de la Legislatura, bajo el lema «En defensa de la educación pública».
«Junto a estudiantes secundarios, terciarios y universitarios, docentes y comunidad educativa nos movilizamos en una gran marcha en repudio a la política educativa del gobierno porteño, por un salario igual a la canasta familiar, en defensa de nuestros derechos laborales, de la ESI y los derechos de las diversidades, en defensa de los profesorados, contra la reforma del estatuto, contra las pasantías obligatorias, y por todas nuestras demandas», expresaron desde Ademys, uno de los gremios educativos del distrito.
Desde la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), el secretario de Educación Superior, Esteban Sottile, denunció que «el Gobierno de la Ciudad presupuesta y ejecuta poco» y agregó que «invierten más en hacer veredas que en la educación».
«La Ciudad tiene problemas gravísimos en varias de las instituciones, tenés problemas de filtraciones como del sistema de calderas que, en este momento que está haciendo tanto frío, se hace notorio», sostuvo Sottile, en declaraciones a FM La Patriada.
Desde una conferencia de prensa, organizada este martes a las 10 en la Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas, en el barrio porteño de Palermo, alumnos y alumnas de diferentes centros de estudiantes, cooperadoras, Ute y Ademys, remarcaron su reclamo también respecto de la resolución del Gobierno porteño que prohibió el uso del lenguaje inclusivo en las instituciones escolares, los problemas edilicios y atrasos salariales y la inclusión de pasantías en las escuelas que no fue consensuado con docentes y estudiantes.
«Es super importante que el nexo entre el mundo laboral y la secundaria exista pero que tiene que ser realmente acompañando nuestra experiencia y no atropellándola, que es lo que está sucediendo»Amparo López, vocera del centro de estudiantes del Lenguas Vivas
«Nosotres venimos con el tema de las pasantías, donde el Lenguas es un colegio piloto desde el 2018 y desde ese entonces tenemos la secundaria del futuro con los baches que tiene en la pedagogía y terminamos la primera camada con pasantías que son precarizantes y no están siendo propuestas que acompañen la cursada, se pierden un montón de contenidos que después les pibes tienen que aprobar», dijo a Télam la vocera del centro de estudiantes del Lenguas, Amparo López, estudiante de quinto año.
A su vez, desde la conferencia de prensa organizada en su escuela, remarcó que lo que quieren es «discutir esta medida y no rechazarla porque es super importante que el nexo entre el mundo laboral y la secundaria exista pero que tiene que ser realmente acompañando nuestra experiencia y no atropellándola, que es lo que está sucediendo».
«La marcha de mañana, además de esto, reclama por la resolución de la prohibición del uso del lenguaje inclusivo, lo poco que está bajando la Educación Sexual Integral (ESI), los problemas de infraestructura, ahora que arranco una mega ola de invierno hay miles de escuelas sin calefacción», indicó la estudiante, que recordó la consigna de la marcha de mañana será «menos marketing y más educación».
El lunes, la Multisectorial por la Escuela Pública presentó un mapeo de las necesidades edilicias de las escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires, donde denunció que el 20% de las escuelas porteñas de gestión estatal tiene problemas edilicios y el 10% no tiene calefacción y reclamó «soluciones concretas» al Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta.
Según ese informe, unos 200 edificios escolares tienen filtraciones, caídas de mampostería, baños clausurados, inconvenientes en el cableado eléctrico y falta de suministro de agua, mientras que unas 112 escuelas de un total de 950 no tiene calefacción, ya sea por falta del suministro de gas o porque no funcionan los artefactos, lo que perjudica a más de 100.000 alumnos y alumnas durante los meses de invierno con bajas temperaturas.
Esta situación «afecta el normal desarrollo de la actividad escolar y pone en riesgo a integrantes de las comunidades educativas», advirtieron.
En esa línea, desde Ademys también remarcaron que la marcha se realiza para reclamar «en defensa de los derechos laborales y contra las reformas al Estatuto docente, por mejores condiciones de infraestructura y educativas, en defensa de los Profesorados, por la titularización docente y en contra de las pasantías obligatorias en la secundaria».
«Porque la escuela somos todes, en rechazo a la censura y prohibiciones del gobierno» sobre el uso del lenguaje inclusivo, concluyeron.