El monumento icónico de la CABA, fruto de la inspiración del arquitecto Alberto Prebisch, fue inaugurado el 23 de mayo de 1936, dentro de los festejos patrios llevados a cabo ese año, con motivo de los cuatrocientos años de la Primera Fundación de la Ciudad encabezada por Pedro de Mendoza, el evento contó con la presencia del Presidente Agustín P Justo.
Este auténtico referente de los porteños y de los argentinos en el mundo, en 2021, cumplirá sus primeros ochenta y cinco años, y con tal motivo, comenzaron diferentes tareas de pintura, mejoras en el enrejado y mantenimiento en general para devolverle el esplendor característico.
Los trabajos planificados para dos meses aproximadamente, demandarán trescientos ocho litros de pintura, además de preservar su superficie, le devolverán el color blanco tiza fundacional. La primera mano, luego del lavado, será una capa anti-grafitti y luego se impone una capa de latex acrílico de color Piedra París. Las rejas para evitar los actos de vandalismo, serán sometidas a un proceso especial conocido como decapado, con el objetivo principal de poner en valor el material metálico con el cual están confeccionadas.
En 2016 un grupo de vecinos/as seleccionados por medio del Programa Participación Ciudadana tuvieron la oportunidad de hacer algo inédito: recorrer el Obelisco por dentro. Una obra que si no existiera, habría que inventarla: mide 67,5 metros, dispone de una escalera recta de hierro sin baranda que consta de doscientos seis escalones, siete descansos, hasta arribar al mirador y sus cuatro ventanales pequeños, a través de los cuales se puede apreciar un paisaje increíble de la Avenida 9 de Julio, y del Centro de la Ciudad. El trayecto hacia la cima demanda quince minutos.
Para su construcción se necesitaron seiscientos ochenta metros cúbicos de cemento y mil trescientos metros de piedra calcárea traída desde la provincia de Córdoba.
La empresa que realizó la obra fue la alemana Compañía General de Obras Públicas del Estado, GEOPE. La misma entidad que tuviera a cargo la edificación de la Galería Güemes, el Correo Central, el Estadio La Bombonera del Club Boca Juniors, y la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires.
Cada una de sus fachadas rinde homenaje a diferentes acontecimientos históricos de particular significado para los argentinos: las dos Fundaciones de la Ciudad, el Primer Izamiento de la Insignia Nacional, y la Ley del Congreso Nacional que estableció los lineamientos para la creación de la Capital Federal.
El dato curioso
A poco de ser inaugurado, el Obelisco Emblema Ciudadano, fue criticado, generando resistencias de todo tipo. Con decir que en 1939 estuvo a punto de ser demolido.
La Legislatura voto por la demolición-Ordenanza 10.251-, ¿los motivos? Razones estéticas, de seguridad y económicas.
Finalmente, llegó el veto salvador de parte del intendente Arturo Goyeneche que impidió la drástica e irracional medida.
Por Visión Porteña
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