En el mediodía del viernes 19 de febrero, el presidente Alberto Fernández, presentó el Consejo Económico y Social. El anuncio lo realizó junto a Gustavo Béliz, que será quien estará al frente de esta propuesta.
El escenario fue el Salón de la Ballena del Centro Cultural Kirchner (CCK). Fueron presentados los 25 integrantes del nuevo organismo que son representantes de distintos sectores como gobernadores, sindicalistas, empresarios, representantes sociales, científicos, los distintos cultos, los movimientos sociales y educadores. El discurso inaugural estuvo a cargo del secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, en su carácter de presidente del proyecto. Recordemos que esta es una propuesta, que fue anunciada por Fernández en el inicio de su mandato como presidente. Es una apuesta en la cual cree firmemente y considera indispensable para armar el despegue argentino. En diversas circunstancias se mencionó recurrir a este camino para acordar la reconstrucción de las estructuras del Estado.
Siempre en la necesidad de encontrar nuevas alternativas para remediar los males que nos perturban desde hace décadas. Alberto, de movida creyó en este proyecto. La pandemia lo sacó de contexto y postergó la decisión de comenzar a ejecutarlo. El momento ha llegado. Es de esperar que pueda ser conducido con la resolución y capacidad necesaria para lograr el resultado tan anhelado por todos los argentinos. Alcanzar el crecimiento que nos permita recuperar lo perdido a través de largos años. El resto de las naciones, en su gran mayoría, continuaron desarrollándose. Con distintas velocidades, pero siempre avanzando. Mientras Argentina retrocedía y perdía mucho de lo conquistado, con mucho esfuerzo, pero con logros muy importantes. De esto hace mucho tiempo.
El Consejo es también una aspiración de Béliz, quien no aparecía en esta gestión con un papel preponderante y extrañaba esa situación. Pues, este era el destino del secretario de Asuntos Estratégicos. El cargo corresponde totalmente al objetivo del plan. Es realmente un tema de alta estrategia el que se deberá implementar para crear las bases del futuro de nuestro país. Están girando diez temas que demandarán el establecimiento de políticas de Estado a mediano y largo plazo. Esa es la tarea que desempeñaran los flamantes integrantes del Consejo. Estarán divididos en 25 comisiones. Las áreas que competen, en un principio son cinco: productividad e integración social, medio ambiente, el futuro del trabajo, comunidad del cuidado e institucionalidad. Tendrán muy en cuenta todo lo que tienda a solucionar las carencias en endeudamiento, seguridad, educación, ciencia y tecnología.
A partir de esta primera reunión comenzarán a trabajar cada una de las comisiones y volverán a reunirse en diez días. El Presidente se expresó sobre el particular, con estas palabras: “Nadie puede ser feliz en una comunidad con infelices. Nadie. Alguien me dijo: Es raro tu discurso, porque está lleno de conceptos morales. Como si la política no estuviera llena de moral. La ética de la política es sacar del pozo al que está en el pozo. ¿Cómo se puede desarrollar esa ética, si estamos todos disociados? Este Consejo Económico tiene ese sentido. Están todos convocados para que, de una vez por todas, construyamos un país con otra lógica”. Se desprende de esta frase que el espíritu del proyecto tiene una tendencia a rescatar la ética, lo social y la moral además del crecimiento y del bienestar. Tiene mucho sentido porque los argentinos debemos recuperar la dignidad del trabajo y confiar en que el Estado normalice la situación angustiante que se vive con la pobreza que se origina en la falta de trabajo.
En el paupérrimo poder adquisitivo de los salarios. Que fueron incendiados por el fuego de la inflación constante y progresiva, que destruyó la estabilidad y la posibilidad de progreso. Para el presente y también para el futuro. Esa es la misión. Nuestra esperanza está, ahora en manos de este organismo. Dependemos de su éxito para que se revierta la angustiante situación que vive el pueblo argentino Todos apostamos por el alcance de los objetivos propuestos. Para el bien de todos. Fernández insistió en “Repensar el capitalismo. No es posible pensar una economía sin ética. Creer que el secreto es estar el uno contra el otro, ha dejado al país, en medio de una sociedad injusta y desigual”.
Gustavo Béliz, viene trabajando en el armado del proyecto desde hace varios meses. Calladito y en silencio. Viajó por el mundo. Observando cómo funciona en otros lugares, los organismos como este. El derrotero lo llevó a estudiar cómo se resuelven estos temas en países como Irlanda, Italia, Francia, Países Bajos, Bélgica y España. También analizó en profundidad el Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas. Béliz lo resume de esta manera: “El Consejo va a tener un horizonte de mil días de trabajo, que se va a organizar en cinco misiones estratégicas para la vida del país, que tendrá cada una cinco proyectos transformadores para discutir los problemas que hacen al corazón y la esencia de la Argentina”.
Sobre los integrantes que fueron citados, Fernández dijo: Fueron convocados para que, de una vez por todas, se pueda construir un país con otra lógica. La del diálogo y el encuentro. No es una mesa para ver qué interés predomina”. Para el trabajo de las comisiones se podrán sumar, y así lo tienen previsto, otros invitados como, unos 100 integrantes del Conicet, representantes de otros sectores, expertos del país e internacionales como Ricardo Lagos, Dilma Rousseff y José Mujica, y los economistas Jeffrey Sachs, Luigino Bruni y Rebeca Grynspan. Las puertas están abiertas para los que quieran adherir y aportar al proyecto. Gustavo Béliz agrega: “La sumatoria de las visiones presentes en el Consejo, se contrapone a la avaricia de la mirada excluyente. Hay que superar el pensamiento único. Los puños cerrados no siembran“.
Por Francisco Grillo
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