En setiembre, la Ciudad, facilitó el primer paso de aperturas de actividades en locales gastronómicos, con la condición de respetar los protocolos específicos. Ahora, ofrece la oportunidad, también a los Bares Notables.
También se habían intervenido áreas peatonales, por lo menos, una por comuna. Lugares generados y programados, en sus protocolos, por el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana, para que el público pueda acceder al paseo peatonal por esas zonas y disfrutar de sentarse en las mesas y sillas colocadas en los frentes de los locales. Es una especie de volver a la normalidad. Que nunca será la misma, mientras el enemigo invisible continúe en actividad y no dispongamos de una vacuna efectiva. Por el momento, sólo nos queda aceptar que debemos aprender a convivir con el virus. Eso representa que debemos reconocer que está presente y en actividad. Aunque las cifras vayan disminuyendo. Es lo que está ocurriendo en Europa. Que aparecen rebrotes cada tanto y vuelven a fases anteriores. Ocupar los mismos espacios que el virus significa que debemos cumplir, estrictamente, con las prevenciones delineadas en los protocolos diseñados para cada actividad. Esa es nuestra responsabilidad.
Los Bares Notables habilitados están ubicados en los barrios que enumeramos a continuación: San Telmo, San Cristóbal, Balvanera, La Boca, Nueva Pompeya, Boedo, Caballito, Villa Devoto, Villa Santa Rita y Chacarita.
Enrique Avogadro, ministro de Cultura de la Ciudad, pronunció, en este sentido, estas palabras: “Los bares notables tienen un rol cultural muy importante en nuestra ciudad y estamos trabajando para que cada vez estén más cerca de los vecinos. Además, a las medidas ya aplicadas, como el acompañamiento a través de subsidios, la exención del ABL, y las campañas de difusión, le sumamos esta iniciativa que les permitirá poner mesas en la calle. Queremos que la gente pueda encontrarse con oportunidades de participación cultural en diversos lugares de la ciudad”.
El listado de los Bares Notables habilitados:
- Bar El Sur, Estados Unidos 299, San Telmo. Según la descripción del escritor porteño Marco Denevi: “Bar Sur…este pequeño gran templo nocturno donde podemos oficiar nuestros rituales más queridos, más característicos de nuestra condición de porteños”.
●Bar El Federal, Carlos Calvo 595, San Telmo.Testigo de la historia de Buenos Aires, emblema de San Telmo, protagonista de la ciudad por de más de 150 años. Comenzó como pulpería, almacén de ultramarinos, prostíbulo y almacén con despacho de bebidas. Su arquitectura es un símbolo del Buenos Aires de hace un siglo y medio. Fue testigo de la transformación de la ciudad. Barra de madera con arco en alzada, mosaicos calcáreos originales, antigua máquina registradora, las chapas enlozadas y los avisos publicitarios del siglo pasado forman parte de su colección.
● Miramar, Sarandí 1190, San Cristóbal. Entre sus paredes se puede sentir la historia de la gastronomía porteña. Impregnada de recuerdos del tango, el fútbol y la cultura de Buenos Aires y sus personajes. Se pueden observar objetos antiguos inimaginables, adornos, las sillas, las mesas, botellas, carteles.
● Bar De Cao, Av. Independencia 2400, Balvanera. La imagen de aquellos almacenes de barrio que eran un modelo de negocio repetido en toda la antigua Buenos Aires. El almacén, al lado el despacho de bebidas y atrás, la vivienda familiar. Al principio funcionaba como fonda. Cuando llegaron los hermanos Cao lo cambiaron a la actual estructura con el nombre de «La Armonía». Después adoptó el actual nombre, el de sus fundadores
● La Buena Medida, Suárez 101, La Boca. Abrió sus puertas en 1905, también como almacén y despacho de bebidas, luego tipo bodegón. A partir de la década del 70 fue atendido por la familia Schiavone, partiendo por «El Bebe Ángel» y continuando con su hijo Antonio. Recuerdos de todo tipo, sobre todo de la presencia repetida de jugadores de fútbol, artistas y todas las especies de personajes relevantes de la ciudad.
● El Buzón, Esquiú 1393, Nueva Pompeya. Ubicado en un auténtico barrio tanguero de Buenos Aires. “La esquina del buzón” rojo, como en el tango. Su actual fachada no conserva las características originarias. Sí, el alma del boliche del barrio, donde paraban sus más conspicuos vecinos. y compartían los temas con el dueño sentado en una mesa.
● El Estaño 1880, Aristóbulo del Valle 1100, La Boca. En el barrio de La Boca desde 1880. Antes de su apertura como café y restaurante, funcionaba la fonda Estrella del Sud cuyos clientes principales eran los trabajadores del puerto y obreros de la Casa Amarilla. Una anécdota cuenta que Sarmiento estuvo por el local, en distintas oportunidades, de paso para visitar una vecina, una de sus últimas novias. En 1939, los recién llegados de España, Manuel López y su esposa Teresa Vicenta Novaro, se hicieron cargo del local y lo transformaron en almacén con despacho de bebidas con el nombre de Don Lorenzo.
● Esquina Homero Manzi, Av. San Juan 3601, Boedo. (Funcionará los viernes de 17 a 00 h; los sábados de 12 a 00 h, y los domingos y feriados de 10 a 22 h.). El edificio se construyó en el año 1927, desde entonces se constituyó en el epicentro de los encuentros del porteño con el tango y sus artistas. Por esta emblemática esquina pasaron todo tipo de personajes y es un símbolo de la cultura y el alma ciudadana. Sigue teniendo el mismo atractivo para los residentes y es motivo de visita de infinidad de turistas.
● Café Margot, Av. Boedo 857, Boedo. Desde 1904, funcionaron en este local diversos tipos de comercios. Bombonería, restaurante, fábrica de pastas y confitería. Cuando se convierte en café y comidas, atrae a todos los personajes representativos de la bohemia porteña, Artistas, poetas, deportistas, músicos, cantantes. Todo ese ambiente tan especial entre esas instalaciones recreaban un estilo muy particular de la época.
● El Viejo Buzón, Neuquén 1100, Caballito. Muy conectado al ambiente del fútbol por su vecindad con la cancha de Ferro. Sus dueños comentan que es “un pedazo del tablón de la tribuna del verde”. Concurren habitualmente hinchas, jugadores, técnico y dirigentes. También funciona desde su local, la radio Conectividad. Hace unos cien años se abrió como panadería y luego se convirtió en el lugar habitual del encuentro de los vecinos. Su nombre es en honor al «Buzón de la esquina», personaje siempre presente.
● Stylo Café, Fernández de Enciso 3934, Villa Devoto. (Funciona de lunes a jueves entre las 8 y 20 h; los viernes de 8 a 00 h ; los sábados de 8 a 00 h; los domingos de 8 a 22 h y los feriados de 10 a 22 h.). Un bar notable de características especiales. Es el único que está ubicado en el interior de una galería. Cuenta con tres espacios físicos para aprovechar. En esta etapa el único para poder visitar es el lugar sobre la vereda, muy bien acondicionado y decorado. Hay otro en el interior de la galería y el tercero en la terraza jardín del primer piso. Es una especie de pub irlandés con una decoración acorde a ese estilo
● Café de García, Sanabria 3302, Villa Devoto.El matrimonio de Metodio García y su esposa Carolina, cuando llegaron a Buenos Aires desde su España natal, fundaron, en 1927, este otro representante que queda en pie, de aquella camada de almacenes con despacho de bebidas y vivienda familiar. Actualmente quedaron a cargo los hijos de este matrimonio, Hugo y Rubén García. Algunas reformas lo actualizaron sin perder la esencia. Una de ellas, las habitaciones familiares se transformaron en un salón para los clientes y en las veredas de ambas calles que conforman la tradicional esquina, el Paseo de Metodio y Carolina, en homenaje a los fundadores y padres. Un hermoso lugar lleno de glicinas y adornado con rejas, ruedas de carros y otros elementos. decorativos
● Café El Tokio, Av. Álvarez Jonte 3550, Villa Santa Rita.Inaugurado el 23 de abril de 1930. A través de estos largos años fue el testigo permanente del paso del tiempo. El lugar de encuentro de los vecinos y de las múltiples personalidades que desfilaron por sus instalaciones. El típico café bodegón argentino. El de «la ñata contra el vidrio».
● Café Palacio, Av. Federico Lacroze 3902, Chacarita. Su nombre se debe al propietario inicial del Café, el español Valeriano Sierra, había nacido en el pueblo de Palacio. En el 2001, Alejandro Simik fundó el Museo Fotográfico Simik, en las instalaciones de este Café Palacio. Se ha convertido en un museo de fotografía. Existen unas 20.000 fotografías de forma permanente. Se realizan exposiciones. También es sede del Club de Fotógrafos con Cámaras Antiguas y Museo de Cámaras. Ahora, agregaron el Museo Cinematográfico.
La Ministra de Espacio Público e Higiene Urbana de la Ciudad, Clara Muzzio, describe a estos espacios con esta frase: “Los bares notables constituyen nuestro patrimonio cultural ya que han permanecido en el tiempo durante años y forman parte de la identidad porteña. Es por eso que decidimos incluirlos en esta apertura progresiva del espacio público para que puedan funcionar con mesas al aire libre”.
Por Francisco Grillo
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