8 de diciembre, 2022
Hoy abría que armar el arbolito de navidad, pero ¿qué pasa con lxs que no somos creyentes? ¿lo armamos igual para no sentirnos sapos de otro pozos? ¿Y si reivindicamos nuestro sentimiento de parias? ¿o existe la posibilidad de hacer unas navidades diversas? ¿No será que eso es puro chumuyo del capitalismo para vendernos un árbol común, de navidad, pero tuñado con 7 colores…?
Sale una paloma de un círculo de luz que envuelve a la Virgen María, mientras ella reza arrodillada. De la luz también emerge el arcángel Gabriel, con cabellos largos y dorados, tan hermosx es su belleza que excede los géneros. Lleva un vestido largo, tan blanco que parece plateado. Las alas permiten que se quede suspendido, entre el cielo y la tierra, sobre una nube, como si fuese AstroBoy. Tiene una flor en la mano y un aura que gira incandescente alrededor de su cabeza. El arcángel Gabriel se acerca y le anuncia que va a ser madre.
“Como una
virgen tocada por primerísima vez.
Oh, nene, ¿puedes oír el latido de mi corazón?”,
cantaba Madonna en Like a virgin;
allá por 1984. Claro que las primeras veces son importantes y recuerdo la
primera escena de Reservoir Dogs cuando hablan de Madonna y la virginidad, mientras
busco la caja con los adornos para armar el fucking arbolito, así no me siento
taan distintx a los vecinos; y reflexiono acerca de la Virgen María y su
embarazoso embarazo donde prescindió de un hombre para su gestación. ¿Una forma
de despecho frente a la manada de hombres embravecidos que se peleaban por
ponerla? ¿Un sueño que se hizo realidad después de haber sentido repulsión por
todo lo relacionado con lo fálico? ¿Un goce místico, alucinado, que reemplazó
las relaciones sexuales por miedo a que se hagan un hábito y transformarse en
putx? No nos podemos hacer lxs tontxs: el mito de la madre virgen no fue creado
con ingenuidad y no pasó por nuestra cultura sin dejar consecuencias.
Varga Llosa en Elogio de la madrastra tira abajo la
idea que la mujer se realiza como mujer al convertirse en madre, dejando su
esencia de mujer deseante para entregarse al cuidado de sus hijos y su esposo.
La novela cuenta la historia de una madrastra que vive en armonía con su marido
hasta que se involucra emocional y sexualmente con su hijastro. La madre bien
vista, en el imaginario social aparece como santa; y sino, pensemos en el culto
que le hacen los tangueros “mi vieja es una santa, no come carne: ergo no coge”.
El marianismo
es la corriente religiosa que adora a María, por ser virgen y porque no goza,
no tiene sexo, y deviene una cosa (¿un potus?) y así alcanzaría la espiritualidad
que proviene del sacrificio y la aprobación de los hombres, que la quieren
virgen. ¿Y quién dijo que la Virgen no gozaba como una hija de puta, por más
que no la hayan penetrado? pensaba mientras bajaba la estrella de la punta del
arbolito. Además las bolas de colores no bajan de los 10.000 $, los más
chiquitos, y las luces navideñas los 5000 $. Guardo el árbol y me quedo
haciendo malabares con los adornos, pensando que la madre virgen es otra
forma de someter a la mujer bajo el dominio de los usos y placeres del poder.
¿Quién dijo que la religión no es machista y heteronormativa?
