30 de noviembre, 2023
Como consecuencia del plan de ajuste que promete el presidente electo Javier Milei, la Argentina sufrirá un período de alta inflación y estancamiento. En esta nota, un repaso de los antecedentes y las posibles consecuencias de esta coyuntura económica.
El presidente electo de la Argentina, Javier Milei, declaró que bajo su gobierno el país sufrirá un período de estanflación porque “el reordenamiento fiscal va a impactar negativamente en la actividad económica”.
Esto significa que aumentaría el ritmo del incremento de precios y a la vez habría una fuerte caída de la producción, del consumo y el empleo; como consecuencia del plan de ajuste que promete Milei.
En este sentido, declaró que “la única billetera que va a estar abierta es la de Capital Humano, para dar contención a los caídos”. Es decir, que el ajuste va a impactar de tal manera en las mayorías populares que no tendrá otra opción que mantener la asistencia del Estado.
El economista y director del ISEPCi (Instituto de Investigación Social, Económica y Política), Isaac Rudnik, ofreció su mirada a Nota al Pie y afirmó que “la consecuencia principal de la estanflación será una fuerte pérdida del poder adquisitivo de los salarios, jubilaciones y asignaciones sociales”.
Más ajuste, más inflación y menos trabajo
Para Rudnik, Milei “anticipa estanflación porque en los primeros tiempos del nuevo gobierno la reducción del gasto va frenar la economía, sin preocuparse por frenar la inflación”.
Debido a la mirada libertaria en contra de la intervención del Estado, el golpe del ajuste a la economía será profundizado por la liberación de precios, la fuerte devaluación y la desregulación del comercio.
El impacto de las definiciones económicas de Milei se pueden percibir antes de asumir el gobierno de La Libertad Avanza (LLA). Por su disposición a eliminar completamente la obra pública y cancelar incluso las obras en marcha, más de 600 trabajadores fueron despedides en distintas provincias y al menos 10 mil están en suspensión.
El pasado de la estanflación en la Argentina
La estanflación es una vieja conocida de les argentines, ya que en muchas oportunidades se dio la combinación de estos dos fenómenos económicos. Sin ir más lejos, la pandemia por el coronavirus provocó una fuerte caída del PBI (Producto Bruto Interno) sumado al aumento de precios en 2020.
Además, el año corriente podría repetirse esa situación. En los primeros 10 meses del 2023 se registró un 120% de inflación acumulada, y se prevé que habrá una recesión de más de dos puntos, según informes del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM).
Remontándonos a la última década del siglo pasado, la implementación del Régimen de Convertibilidad en 1991 eliminó por un tiempo la estanflación: la actividad económica disminuyó en algunos periodos pero la inflación brilló por su ausencia.
Sin embargo, este régimen derivó en la enorme crisis económica, política y social del 2001. La salida de la Convertibilidad significó la vuelta de la estanflación en 2002, con una fuerte recesión y la inflación en 50%, aunque para 2003 fue sólo del 3,7%.
En contraste, ahora el presidente electo plantea que la estanflación derivada del ajuste es la única alternativa para evitar la hiperinflación. Además, sostiene que el rezago inflacionario se mantendrá inevitablemente de 18 a 24 meses. Fuente: Notaalpie.