A partir de mañana, miércoles 2 de marzo, el Ministerio de Salud de la Nación, comenzará la distribución de la primera entrega de la vacuna Pfizer pediátrica. Esto fue decidido después de la reunión sostenida entre la cartera de Salud y la Comisión Nacional de Inmunización, para definir la estrategia técnica de su aplicación.
Esta vacuna se aplicará exclusivamente a los niños de 5 a 11 años. Ya que tiene una formulación especialmente orientada hacia ese segmento de la población. Contiene los mismos contenidos activos que el producto de ese laboratorio, que se aplican a los adultos y adolescentes. Las diferencias radican esencialmente, en la concentración, el volumen de la dosis final y el número de dosis por vial.
La dosis es de 10 microgramos, cuando para adultos y adolescentes, el contenido es de 30 microgramos. Se puede apreciar desde el envase porque viene con una tapa de color diferente. También, para esta vacuna pediátrica se utiliza un amortiguador distinto a la destinada para mayores de 12 años, incluyendo a los adultos. Este tipo de amortiguador permite que, a temperaturas refrigeradas, se conserve por mayor cantidad de tiempo.
A esta altura de la nota, nos preguntamos: ¿De qué se tratan los amortiguadores? Son productos que contribuyen al mantenimiento del pH de la vacuna y la habilitan para que se mantenga estable a temperaturas refrigeradas. Se recomienda, además que los menores, al igual que los mayores, reciban la segunda dosis, después de las tres semanas de aplicada la primera. La ministra de Salud, Carla Vizzotti, lo confirma con esta frase: “Es una vacuna diferente para pediatría“.
Por su parte, Sandra Tirado, secretaria de Acceso a la Salud, lo detalla con estas declaraciones: “Se trata del primer cargamento de dosis que seguirán arribando durante febrero y marzo. La idea es que se sumen a las vacunas que ya se están administrando en la población pediátrica y adolescente, teniendo en cuenta el regreso escolar”.
Entre las recomendaciones, para tener en cuenta y estar prevenidos, podemos mencionar algunos de los efectos secundarios que pueden registrarse después de la aplicación de estas vacunas Pfizer pediátricas: Dolor en el lugar de inyección. Fatiga o sensación de cansancio. Cefalea. Dolor muscular y de articulación, son las reacciones que se producen con mayor frecuencia. En algunos casos, también se pueden presentar: Mialgias, escalofríos, artralgias, fiebre o inflamación en el lugar de inyección. Por lo general, duran pocos días y desaparecen.
Por Francisco Grillo
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